Entorno

Guadix

Guadix es una ciudad privilegiada, tanto por su ubicación geográfica como por su riqueza monumental. 

Su principal atractivo es orográfico, por su emplazamiento a los pies de Sierra Nevada, en la llamada Hoya de Guadix, rodeada de espectaculares formaciones de tierra arcillosa, labradas por el agua, el viento y la acción del hombre.

Declarada Conjunto Histórico, Guadix posee un vasto patrimonio monumental conformado por 14 iglesias, palacios edificios civiles y la Judería. En el interior de la antigua medina se enclava el Barrio Latino, que conduce a la Catedral, fusión de los estilos gótico, renacentista y barroco. Al sur se sitúa la Alcazaba, del siglo XI y la Iglesia de Santiago, catalogada Bien de Interés Cultural. 

Guadix alberga la mayor concentración de cuevas de Europa, es con los musulmanes cuando adquieren la consideración de obra constructiva, erigiéndose como atalayas, refugios, graneros y viviendas permanentes. 
Esta arquitectura subterránea ha sabido conservar sus rasgos característicos sin renunciar a la comodidad y el confort presente en las actuales casas cueva.

Marquesado

El Marquesado del Zenete es una pequeña comarca situada en la cara norte de Sierra Nevada. Con un paisaje extraordinario, llama la atención la diferencia entre las cumbres de las montañas de Sierra Nevada, con la llanura del valle y la aridez del altiplano. Destacan los pequeños pueblos de esta comarca, anclados al pie de la montaña, el Palacio de la Calahorra o las minas de Alquife. 

El Palacio o Castillo de La Calahorra, uno de los palacios renacentistas más bellos de España. Fue edificado a comienzos del S. XVI e inspirado en modelos italianos, impresiona su gran patio con arcadas. 

Puerto de la Ragua

La Ragua, catalogado como la segunda estación invernal de la provincia, está situado dentro del macizo de Sierra Nevada, pero en su parte más desconocida. El Puerto de la Ragua es un paso natural entre Granada y Almería, que ha conservado a lo largo de los siglos sus costumbres, estilos de vida y tradicciones. 

Lejos del bullicio que se respira en las estaciones de esquí alpino, ésta fomenta la práctica de actividades deportivas compatibles con el entorno, como el esquí de fondo, la bicicleta de montaña, el senderismo, la orientación o el tiro con arco, conviviendo en armonía con el paraje natural en el que se enclava.

Sierra Nevada

Sierra Nevada, con los picos más elevados de la Península (Mulhacén con 3.482 m. y Veleta con 3.398 m.), fue declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1.986, debido a la riqueza de su flora y fauna. Ofrece un conjunto improsionante de sierras, pueblos y valles que se extienden hasta el mar mediterráneo.

Las laderas de poniente del pico Veleta acogen la Estación de Esquí y Montaña más meridional de Europa. El desnivel esquiables, los medios mecánicos y las pistas ofrecen características idóneas para la práctica de deportes de invierno. Además Pradollano cuenta con una amplia oferta hotelera y de restauración. 

El resto de la sierra, que guarda un rico ecosistema, la convierten en Parque Nacional.

Sierra Nevada ofrece durante todo el año multitud de fiestas y eventos deportivos, con una temporada de esquí que se prolonga desde el otoño a los primeros días de mayo. En verano se convierte en el lugar perfecto para la práctica de todo tipo de actividades de turismo activo, actividades en familia, cursos de idiomas, campamentos, competiciones, etc. 

Granada

Granada está situada en la confluencia de los ríos Darro y Genil, con Sierra Nevada de fondo. Es una de las ciudades más bellas y emblemáticas de España. La extensa monumnetalidad que alberga, gran parte fruto de su pasado musulmán, y a la posterior contribución cristiana, merecen una detenida mirada a la ciudad. 

La Alhambra, como obra cumbre del arte nazarí, y la belleza del Palacio y los Jardines del Generalife, el Palacio de Carlos V, la Catedral, la Cartujalos Cármenes, el Corral del Carbón, los Baños Árabes, y un amplio etc. Además de valiosas joyas que albergan los diferentes museos de la ciudad. 

Granada, con sus pintorescos rincones y callejuelas de sabor árabe, nos transladan en el tiempo, como se puede apreciar en los barrios de Albaycín, el Sacromonte con sus cuevas, o el Realejo
El centro de la ciudad, con numerosos comercios y actividad, destacando aquí la Alcaicería, que ofrece una muestra de productos tradicionales en una encrucijada de callejuelas. Para divertirse y degustar sus exquisitas tapas podrán hacerlo recorriendo sus típico bares; en las zambras, cuevas y tablaos podrán disfrutar de una velada flamenca. 

Esta ciudad mágica, especialmente bonita en primavera, es de obligada visita para pasar unos días inolvidables.